El Real Decreto 39/1997, de 17 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de los equipos de protección individual (EPI), es una norma española que establece los requisitos mínimos que deben cumplir los equipos de protección individual (EPI) utilizados en el ámbito laboral.
Los equipos de protección individual (EPI) son aquellos elementos diseñados para ser utilizados por una sola persona para protegerse de riesgos específicos relacionados con el trabajo. Los EPI incluyen, entre otros, elementos de protección para la cabeza, los ojos, las manos, los pies, el cuerpo y el aparato respiratorio.
El Real Decreto 39/1997 establece los requisitos que deben cumplir los EPI para garantizar su adecuación y eficacia para proteger a los trabajadores de los riesgos a los que están expuestos. Estos requisitos incluyen, entre otros, los requisitos de diseño, fabricación, uso y mantenimiento de los EPI.
En resumen, el Real Decreto 39/1997 establece los requisitos mínimos que deben cumplir los equipos de protección individual utilizados en el ámbito laboral para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores.